¿Qué es la mediación?
La mediación se define como un proceso voluntario de resolución de conflictos, en el que las partes enfrentadas trabajan con un profesional imparcial que les guía y acompaña en el proceso.
La mediación se define como un proceso voluntario de resolución de conflictos, en el que las partes enfrentadas trabajan con un profesional imparcial que les guía y acompaña en el proceso.
Mientras que la solución por vía judicial únicamente contempla el ataque-defensa entre los implicados, la mediación se centra en proporcionar un espacio protegido para promover y facilitar el diálogo, motivando la comprensión de lo acontecido para alcanzar una solución que realmente satisfaga, sin los tiempos de espera ni el coste económico que hubiera supuesto un procedimiento legal completo. Los términos del acuerdo alcanzado son reflejados por escrito en el denominado Acta de Mediación, que, una vez firmado por ambas partes es presentado al Juzgado para su homologación-aprobación.
Una de las principales características de los conflictos personales es la enorme carga afectiva que contienen. Cuando estos conflictos llegan a los Juzgados, las personas están enfrentadas y no son capaces de resolverlos de manera satisfactoria por sí mismas. A esto se añade que los procesos judiciales no pueden respetar la confidencialidad de los implicados, que en muchas ocasiones ven aireados sus emociones, sentimientos e intimidad, haciendo que el problema empeore, se enquiste y se torne crónico. Además, la solución al problema recae en las manos de un tercero, el juez, quien será el que disponga el futuro de unas personas cuyos valores, situación vital o necesidades profundas desconoce.